¿Orgullosxs
de qué?
¿De
aceptar la invención de lo gay como una identidad de consumo?
¿Orgullo
de esa imagen rubia bien peinada de lo “gay”, generalmente
hipermasculinizada que encasilla a las disidencias en las siglas
LQBTTQI?
¿Orgullosxs
de que el hétero partido Socialista Unido de Venezuela siga
diciéndole maricón a sus adversarios políticos como insulto?
¿Orgullo
por qué el presidente Nicolás Maduro le haga guiños hetero-chevre
al empuñar una bandera del arcoíris para quitarse los señalamientos
de homolesbotransfobia?
¿Orgullosxs
por tener una diputada trans respaldada por un partido de derecha tan
homolesbotransfóbico como el PSUV?
¿Orgullosoxs
de que en Chacao la hetero-política gay friendly permite la unión
estable de hecho -concubinato- entre personas del mismo sexo para
demostrar lo caritativos que son?
¿Orgullosxs
que la “ Sexogenero-diversidad”, esa especie de categoría
monstruosa creada por la heterosexualidad se reúna con Arreaza?
¿Orgullosxs
de que alguna vez el presidente Chávez nombró a la
“sexogenerodiversidad” y por ese hecho la “Revolución” deja
de ser pacata y ya estamos incluidxs?
¿Orgullosxs
de que “por lo menos nos nombraron”, “por lo menos nos llamaron
a reunirnos en el Consejo Presidencial de la Sexodiversidad”?
¿Orgullosxs
de que aún las leyes no reconozca cuerpos/subjetivitades
disidentes?
¿Orgullo
de que la educación sexual en las escuelas aún siga siendo
heterosexista?
¿Orgullosos
de qué los crímenes de odio por homolesbotransfobia en nuestro
país no estén tipificados como tal?
¿Orgullosos
del olvido de los asesinatos a trans y trabajadoras sexuales y el
encierro en el closet de la impunidad de todos los asesinatos a
cachaperxs, maricxs, trans, trabajadoras sexuales?
¿Orgullosxs
de la no reparación ante los asesinatos de odio?
¿Orgullosos
de tener una hétero-fálica revolución que poco revoluciona su
propia moral y se relame en una supuesta vanguardia latinoamericana ?
¿Orgullosxs
de no reconocer en nuestra historia no hetero-compalciente a Sylvia
Riviera, venezolana-puertoriqueña, “reina olvidada en el exilio”,
disidente sexual, quien impulsó junto con J Jhonson la revolución
de Stonewall en EEUU y por lo que hoy en día se celebra el “día
del orgullo”?
Nada
que celebrar.
PD: La
crítica no puede ser complaciente. Las palabras incómodas, los
cuerpos incómodos son los que hacen la Revolución. Soberanías
Sexuales es un espacio de “las disidencias” subordinado a la
heteropolítica complaciente. Desde hace tres años junto a otrxs
compañerxs escribía en esta columna de la Revista Épale Caracas.
Ya no. Por censura. Si nos censuran a unx, nos censuran a todxs.
Hace
47 años Sylvia Riviera, Venezolana-Puertorriqueña, “Reina
olvidada en el exilio”, junto a J Jhonson, ambas migrantes,
racializadas en EEUU se enfrentaron a la policía de la moral,
desencadenando la “Revolución de stonewall”, iniciando un largo
recorrido por los derechos de las disidencias sexuales y de género.
Hoy 2016 la policía de la moral sigue intentando tachar nuestras
voces-textos-cuerpxs, nuestros discursos son discidentes o no son.
Hoy no tenemos nada que celebrar.
por Yosjuan Piña Narváez
@Erchos